viernes, 24 de junio de 2011

Destras de un buen hombre hay una extraordinaria mujer.

Esta semana en casa hemos celebrado día del padre y los cumpleaños de mi esposa y el mío. Cuando lean estas letras ya todo habrá pasado. Recuerdo que con 25 años arribe a este bonito país y hoy después de 20 años sigo viviendo en este paraíso.
A pesar de todo y de todos esto es un paraíso, hay de todo y para todos los gustos. El trabajo ha hecho que los años hayan pasando rápidamente y no se noten mas que en mi frente cada vez mas ancha y en mis piernas cada vez mas adoloridas. Si ya voy para los cincuenta, parezco el abuelito batallitas, he hecho de todo en el mundo de la gastronomía, y seguiré por unos cuantos años mas haciendo lo que humanamente pueda para dignificar este oficio, sigo proponiendo y rebuscando cada dia nuevas recetas para satisfacer paladares cada vez mas exigentes pero tengo que decir que lo hago gracias al empuje que me da mi esposa sin ella no seria lo mismo, ella me consuela en mis malos ratos y me da aliento el resto del tiempo, ella es la que hace que siga adelante, ella es mi motivación por ella es que sigo adelante. Tengo ganas de retirarme pero ella insiste en que tengo que dar mas de mi para que mi huella perdure en el recuerdo de los míos, ella es la que me apoya y me da ánimos para seguir, por ella es que tenemos este maravilloso local, por ella es que tenemos el equipo que tenemos, por ella es que seguimos abiertos, sin su experta mano para los números no hubiésemos llegado a ningún lado, por ella es que las cuentas están claras, por ella es que seguimos ahí cada día brindando lo mejor para ustedes.
Ella ha sido la inspiración de platos como los garbanzos con mariscos o de la nueva sopa de pescado, por ella empezamos con el conejo a pesar de que a ella no le gusta. En fin que seria de mi sin ella, la mas bella, la que me quiere y me hace feliz. Detrás de un buen hombre siempre hay una extraordinaria mujer y ese es mi caso. Gastronómicamente es ella la que me empuja a hacer cosas como los ravioles de centollo o preparar maravillas para mis clientes es la que esta detrás aconsejándome y poniéndome retos , es la que me escucha cuando necesito ser oído y es la que me regaña cuando necesito ser regañado.
Es como el aceite extra virgen que le da sabor a lo que toca, ella es el sabor de mi vida lo que me da fortaleza para salir adelante, es el punto de sal en mis platos, es el punto exacto de cocción de esas carnes y esos pescados en mi vida, es en fin el todo porque sin ella no habría platos sabrosos solo cualquier clase de comida. Por eso me gusta decir que la comida para que sea buena necesita cariño y amor ,como yo lo recibo a diario y en todo momento se lo que lo tengo, cocino para todos ustedes como lo hago sin tapujos ni trampas todo de verdad y con toda mi alma.
Buen provecho

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y sin embargo la perdiste......